Comprar piso para reformar o un nuevo, es algo que se plantea un inversor que lo quiere rentabilizar mediante alquiler. Está claro que comprar algo reformado tiene muchas ventajas.  Ahorramos trabajo y tiempo de puesta a punto del piso. En uno nuevo, sólo necesitamos electrodomésticos, muebles básicos y algo de decoración y lo tenemos listo para alquilar en poco tiempo.

Si lo que buscamos es un inmueble como inversión para rentabilizar mediante alquiler, podemos encontrar muchas ventajas al comprar uno de segunda mano que requiere de reforma o lavado de cara. Es cuestión de hacer números y analizar el presupuesto que necesitamos para ponerlo a punto y conocer por cuánto se alquilan los pisos de similares características tanto nuevos como reformados.

Es verdad que aventurarse a acometer una reforma integral o parcial de una vivienda, conlleva un elemento de incertidumbre. Son preocupaciones como el tiempo que tardaremos, el gasto inesperado por imprevistos que puedan surgir e incluso la calidad y el resultado final del trabajo realizado por la empresa de reformas.

Pero también hay algunas ventajas que no hay que obviar, ante una vivienda de segunda mano que necesita una reforma parcial o total, frente a las viviendas nuevas.

Ventajas de los pisos de segunda mano:

El tamaño del inmueble.

En muchas ocasiones los pisos de segunda mano tienen más metros que las viviendas nuevas, con estancias más grandes.

La ubicación de las viviendas.

Hay pisos de segunda mano ubicados en zonas muy céntricas muy demandadas normalmente, donde no quedan espacios para la construcción de obra nueva.

Viviendas con encanto.

En viviendas muy antiguas, podemos encontrar características inherentes a la vivienda  muy valoradas estéticamente como techos altos, vigas de madera o suelos antiguos con encanto, que van a hacer de la vivienda un lugar único y muy valorado por cierto perfil de inquilinos.

Reforma personalizada.

Otro factor a tener en cuenta es que si necesita una reforma integral, podremos hacer la reforma con un diseño orientado a ser alquilado, incluso adaptado al tipo de inquilino que queremos tener. No son las mismas necesidades las de una familia numerosa que las de una persona sola. Y si el piso es para uso personal,  lo podremos diseñar a nuestro gusto, aprovechando tendencias que nos puedan encantar y diseñar la casa de nuestros sueños.

En viviendas nuevas y de segunda mano ya arregladas, ocurre a menudo que el estilo de la reforma no nos agrada del todo (la carpintería, los baños, los azulejos de cocina, etc…), pero está incluida como parte del precio de la vivienda. Si decidimos comprar esa vivienda, será una decoración que aunque no sea la ideal para alquilar, posiblemente la mantengamos por mucho tiempo, para no incurrir en gastos que no son estrictamente necesarios.

Ahorro fiscal.

Normalmente el precio por metro de la vivienda por reformar es mas bajo que el de una ya reformada por lo tanto el ITP (Impuesto de transmisiones patrimoniales) a pagar en la compra será menor. Es un dinero que podemos destinar a la reforma. Y si se trata de vivienda nueva, tendremos que pagar IVA.

Muchas veces no sabemos ver el potencial de un piso en venta en mal estado y ni nos planteamos la posibilidad de meternos en obras por miedo a problemas, retrasos o descontrol del gasto. La distribución de la vivienda, la existencia de pasillos, las posibilidades de hacer espacios abiertos, optimizar espacios de almacenamiento, la luz natural y la orientación, son aspectos de la vivienda que alguien no profesional puede tener mas dificultad para apreciar, dejándose influir negativamente por otras características como el aspecto antiguo o el mal estado de mantenimiento de la casa.

Por eso ante la duda de comprar piso nuevo o de segunda mano, es aconsejable ponerse en manos de empresa profesional que ayude a identificar y analizar el potencial de una vivienda vieja. En Invest Home Group nuestro equipo busca, encuentra, asesora en la transacción y reforma, hasta dejar el piso listo para su alquiler, venta o disfrute personal. El inversor es informado de todo y sólo tiene que ocuparse de lo imprescindible.